La radiofrecuencia son ondas ultrasónicas generadas por la corriente de alta frecuencia.La energía eléctrica se convierte en la energía electromagnética que llega a los tejidos donde a continuación,se calientan en resultado de la excitación de los iones,capaces de actuar selectivamente en la dermis profunda y en las capas subdérmicas sin riesgo para la epidermis. De esta manera se puede luchar contra las arrugas, la flacidez o la celulitis.

La radiofrecuencia produce un calentamiento profundo desde dentro hacia afuera que afecta a la piel y tejido graso.Dicho calentamiento va a favorecer:

   -El drenaje linfático, lo cuál permitirá disminuir los líquidos y las toxinas en el que se encuentran embebidos los adipocitos del tejido afecto de celulitis.

   -Un aumento en la circulación de la zona que permitirá mejorar el metabolismo tanto del tejido graso subcutáneo como la mejora del aspecto de la piel acompañante.   -La formación de nuevo colágeno y elastina, tanto en la piel como en el tejido subcutáneo, permitiendo que todo el tejido adquiera firmeza gracias a la reorganización de los septos fibrosos y engrosamiento dérmico suprayacente.

   -Migración de fibroblastos, lo cual reforzará aún más la estructura de colágeno, dando como resultado el efecto de relleno de arrugas rejuveneciendo la zona tratada.

El efecto inmediato de la aplicación de radiofrecuencia es calentar las fibras del colágeno lo que provoca su contraccion y tensión,lo que se pretende conseguir gradualmente es la reestructuración del colágeno profundo, lo que incluye que se formen fibras nuevas que sustituyan a las envejecidas y hagan los tejidos más elásticos, se favorezca la homeostasis,aumentando la densidad,elasticidad y tensión de la piel.Tambien se mejora el ovalo del rostro y el color del cutis, en general, mejora el estado de la piel eliminando de ella las huellas del paso del tiempo.En definitiva los resultados son sorprendentes desde la primera sesión.